5 razones para empezar tu intercambio antes de octubre
¿Y si me pierdo el verano con mis amigos acá?
Después del destino que más te acomode, la fecha podría ser lo más difícil de elegir una vez que hayas decidido empezar esta aventura que te sorprenderá de principio a fin. Muchos piensan que la mejor fecha es antes de octubre, para compatibilizar sus planes y estar con sus amigos locales. Para saber la respuesta, le preguntamos a algunos de nuestros estudiantes que ya pasaron por esta dificil decisión. ¿Qué crees que dirán? Lee a continuación:
1. Con un intercambio, cierras tu año y aprovechas tus vacaciones para conocer otro país
“Viajar en septiembre es una de las mejores opciones porque tienes la posibilidad de cerrar el año y aprovechar los meses de vacaciones de verano para disfrutar y estudiar en otro país. Aparte al viajar un semestre desde septiembre, regresas con todas las energías para empezar un ciclo de universidad en marzo/abril”. – Antonia González
2. Puedes transformar tus vacaciones de invierno en vacaciones de verano
“Hice un curso de 2 semanas en Miami en agosto, lo cual fue genial porque coincidía perfecto con las vacaciones que podía tomar en el trabajo. Pude combinar mis vacaciones con estudios de inglés y tener un verano increíble donde conocí gente de todas partes del mundo. Además, tuve dos semanas para hacer miles de actividades fuera y dentro de la escuela.” – Cristobal Ramis
3. Puedes estudiar en otro país, y volver a tiempo de dar un examen de admisión
“Yo quise viajar desde septiembre a marzo porque me tome un año ya que no sabía que estudiar. Así, justo volvía con unos meses para dar los exámenes de admisión” – Bárbara Azocar
4. Te encontrarás con menos hispano hablantes
“En esta época no hay mucha gente que habla español ya que la mayoría de los latinos viajan entre diciembre a febrero. Definitivamente recomendaría viajar más entre estos meses.” – Bárbara Azocar
5. Puedes tomar el tiempo que necesitas para aclarar tu futuro
“Decidí viajar porque me tome un tiempo de la Universidad. No sabia qué queria hacer y estaba perdida. Mi sueño siempre habia sido vivir fuera de Perú y esta era mi oportunidad, congelé la Universidad y me fui a perfeccionar el inglés a Nueva York, mi ciudad soñada. Allá encontré lo que estaba buscando y al volver supe exactamente lo que queria” – Constanza Rinaldi