Lo Mejor de Malta: 9 Razones para Enamorarse de esta isla

Es imposible no enamorarse de Malta. El sol brilla todo el año, hay más playas hermosas de las que podrías desear, una vida nocturna vibrante y un montón de opciones para el deporte y la aventura.

Esta lista hará que te preguntes por qué no vivimos todos en Malta. En serio.

EL SOL SIEMPRE BRILLA

Este país mediterráneo goza de un larguísimo verano de ocho meses, así que nunca es mal momento para disfrutar del encanto rústico de estas islas. Desde abril a noviembre, Malta goza de temperaturas superiores a los 30 °C gran parte del año. Es también uno de los lugares más soleados de Europa, con más de 3000 horas de sol cada año. Incluso en «invierno» podrás darte un chapuzón en sus aguas cristalinas, o broncearte en cualquiera de sus inmaculadas playas.

LAS PLAYAS SON HERMOSAS

Malta tiene playas preciosas, demasiadas como para mencionarlas aquí. Puedes bañarte en la Piscina de San Pedro, o hacer una fiesta con tus amigos en las arenas doradas de Ghajn Tuffieha, en las islas de Malta se encuentra la playa perfecta para ti. El único problema es que una vez que hayas disfrutado de la Bahía Dorada o de la aislada ensenada de Mgarr ix-Xini, te resultará casi imposible marcharte.

EL LAGO AZUL ESTÁ ALLÍ

Malta está formada por tres islas principales. Encajonada entre las dos islas principales, Malta y Gozo, se encuentra la pequeña isla de Comino. La escarpada isla tiene una población de solo cuatro residentes permanentes, pero es el lugar favorito para los lugareños y turistas que buscan paisajes vírgenes y calas escondidas. Ningún viaje a Malta está completo sin disfrutar de las aguas azules y exuberantes del Lago Azul de comino, una de las muchas piscinas naturales de Malta.

UNA VIDA NOCTURNA DE PRIMERA

A los malteses les gusta disfrutar durante el día del estilo de vida mediterráneo relajado, pero no cometas el error de pensar que Malta tiene una vida nocturna tranquila. Ni mucho menos. Mira más allá de las antiguas fachadas y descubrirás que los malteses saben cómo hacer fiestas con importantes DJ internacionales, como Tiesto, que hace pases en la isla. Uno de los lugares rebosantes de vida nocturna es San Julián, un importante punto turístico.

HISTORIA ANTIGUA

Los primeros signos de vida humana y cultura en la isla de Malta datan de hace más de 7000 años, antes de las pirámides egipcias y la Gran Muralla china. No es de extrañar que el encanto de sus calles haga que la isla parezca un museo pintoresco al aire libre.  La ciudad amurallada de Mdina está impregnada de una rica y colorida historia, que se remonta a unos 4000 años. La capital, La Valeta, es tan bonita que toda la ciudad fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

LOS LUGAREÑOS SON ENCANTADORES

Si te alojas con una familia maltesa, no serás un invitado, serás uno más de la familia. La población maltesa es de las más acogedoras del planeta. También les encantan los idiomas, el inglés y el maltés son los idiomas oficiales. Un tercio de la población habla además italiano.

Y LA COMIDA ES DE LO MEJOR

Todo el mundo sabe que la comida mediterránea es una de las más sabrosas que hay. Los platos malteses son una mezcla fascinante de todos los países que han tenido influencia en Malta a lo largo de los años. El maltés se enorgullece de su deliciosa cocina, en la que predominan exquisitos platos a base de pescado.

COMPACTA

Una de las ventajas de visitar una isla tan pequeña es que nunca estás demasiado lejos de la próxima aventura. Las playas impresionantes, la vida nocturna vibrante y las calas tranquilas siempre están a tu alcance y a poca distancia. Puede que Malta solo mida 27 km de largo y 14 km de ancho, pero encierra una gran cantidad de maravillas en tan poco espacio.

Y LLENA DE AVENTURAS

Las acogedoras aguas de Malta hacen que sea uno de los mejores lugares de buceo de Europa. Bucea a través de las cuevas y arrecifes de Comino para experimentar las aguas del Mediterráneo en su mejor azul turquesa. Malta es también un paraíso para practicar otros deportes náuticos, como el windsurf y el esquí acuático. Si eres capaz de salir del agua, puedes hacer también paseos a caballo y rutas épicas de ciclismo de montaña.

Imágenes de (arriba): Jon Rawlinson, Flickr/Creative Commons, (parte superior izquierda a parte inferior derecha): Maria Grazia Montagnari, Flickr/Creative Commons, Berit Watkin, Flickr/Creative Commons, Joshua Zader, Flickr/Creative Commons, M.Peinado, Flickr/Creative Commons.